Queremos echarte una mano con las pruebas de certificación de idiomas (inglés B2).

Primero has de analizar bien cuál es el organismos al que te vas a presentar y cuál es la estructura del examen. Si no tienes claro cual has de elegir, puedes leer este artículo sobre las diferentes opciones (enlace aquí) y organismos.

Estructura del examen

Averigua primero la estructura de la prueba en cuestión. No es tarea difícil, simplemente has de acceder a la web del organismo que realiza la prueba y prestar atención. Suele haber un documento de FAQs o guía de examen.

Si tienes alguna duda de lo que te plantea la prueba, pídele a tu profesor o a nuestra jefa de estudios que te lo explique. Comprender cada parte o tarea será clave para aprobar un examen oral de inglés.

Escuela Oficial de Idiomas:

En la escuela oficial de idiomas, lo normal es tener 2 tareas de expresión oral (el diálogo y el monólogo), y, en ocasiones, una tercera tarea en la mediación lingüística oral.

En la primera de las tareas, no olvides presentarte. En primer lugar, dado que será una presentación que llevarás entrenada, te relajará y te introducirá al examinador. Primero tendrás el diálogo y a continuación el monólogo.

Los examinadores estamos muy entrenados para detectar a los estudiantes que memorizan lo que deben decir. Memorizar como un loro es lo peor que puedes hacer. Así que no uses una presentación memorizada como estrategia para aprobar un examen oral de inglés.

First Certificate

En la modalidad del B2 de Cambridge, disponemos de 4 partes:

  • Presentación personal. Entorno a 2 min de tiempo de hacer una buena presentación.
  • Diálogo. Lo harás con un compañero al azar. Disponéis de un total de 3 min (1 min + 30 segundo + 30 segundos + 1 minuto) para abordar un tema de conversación compuesto de dos fases.
  • Comparación de imágenes. Esta prueba también la realizarás en pareja, donde cada uno de vosotros dispondrá de 3-4 min para hablar de las mismas.
  • Turno de preguntas: 4 min más.

Consejos para preparar el B2:

Alguno de estos consejos parecerán muy obvios, pero el factor nervios a la hora de presentarse al examen puede jugar muy malas pasadas, así que te recomendamos que te prepares muy bien:

  • Responde a lo que se pregunta. Una de las maneras de descubrir este fallo, es cuando las personas dan una respuesta relacionada con la pregunta, pero evaden la verdadera cuestión.
  • Escucha activamente en el diálogo: es decir, por tu propio bien y el de tu compañero no te vayas por los cerros de Ubeda y trata de mantenerte en la línea de lo que se pregunta. Evidentemente, puedes añadir información (que se puntuará favorablemente).
  • Controla el tiempo: sonará a tópico pero es importantísimo que sepas controlar el tiempo. La única forma de hacerlo sin estar contando los segundos y desviando nuestra atención al tiempo, es que practiques y practiques (tanto la presentación como el diálogo). Grábate en audios de whatsapp para escucharte después en búsqueda de errores y ver el tiempo total que has utilizado en cada parte.
  • Decora: Decora de adjetivos para demostrar un mayor dominio de la lengua, completar más tiempo y hacer más atractivo tu discurso. Por ejemplo, imagínate en español que una persona te explica que su gato persa es suave, negro y con una cola esponjosa, en lugar de decir simplemente que tiene un michi.
  • Practica la pronunciación: Habrá mil formas y técnicas para mejorarla. Una de ellas, es colocarse un lápiz en la comisura de la boca e intentar pronunciar más exageradamente.
  • Cuida tu CNV y demuestra seguridad: Al ver a una persona insegura o nerviosa nos fijamos mucho más en el discurso. Si además tu comunicación no verbal acompaña y no muestra nervios, ayudará muchísimo.